INVESTIGACIÓN

En general, se destinan muy pocos fondos a la investigación del cáncer infantil. Poca gente sabe que el cáncer infantil, en su globalidad, es una enfermedad rara debido a su baja incidencia. Afortunadamente, son pocos los niños afectados si lo comparamos con el cáncer de adultos. Hay 1 nuevo caso de cáncer infantil cada año por cada 200 nuevos casos de cáncer de adulto. 

Esto hace que la mayoría de fondos públicos y privados que se destinan a la investigación del cáncer se centren en los adultos, siendo los niños los grandes olvidados. Históricamente han sido las familias y las asociaciones de pacientes quienes han impulsado la investigación de estas enfermedades poco frecuentes.

En el caso de DIPG, no sólo la falta de fondos frenaba la investigación. Existía un problema aún mayor: la falta de tejido y muestras para investigar.

Sólo la presión de las familias hasta lograr que en estos pacientes se empezaran a realizar biopsias hizo cambiar la situación. Gracias a las muestras conseguidas a partir de este procedimiento, la investigación y el conocimiento del DIPG ha avanzado más en los últimos 10 años que en las anteriores cuatro décadas.

A fecha de hoy, ya conocemos mejor a qué nos enfrentamos y cuáles son algunas de las características que definen biológicamente a este tumor, así como sus alteraciones moleculares más frecuentes. Algo impensable hace pocos años, y que abre un camino de esperanza para seguir avanzando hacia nuevos tratamientos para los niños y niñas afectados por esta enfermedad.

De manera muy genérica, podemos decir que los aspectos básicos en los que actualmente se centra la investigación del DIPG son:

  • Estudios sobre la efectividad de nuevos fármacos. Las muestras obtenidas de las biopsias no solo han permitido conocer las alteraciones moleculares de estos tumores sino que han sido la base para desarrollar líneas celulares y modelos animales en los que poder testar la efectividad de nuevos fármacos.  Existen muy pocos modelos animales de DIPG en el mundo. El Hospital Sant Joan de Déu dispone de uno de estos modelos, que intenta replicar el comportamiento y las características del DIPG en pacientes. Disponer de esta herramienta es fundamental para la investigación.
  • Obtención de muestras para su análisis molecular. La biopsia ya es un requerimiento para participar en algunos ensayos clínicos para pacientes de DIPG (por ejemplo, el ensayo conocido como BIOMEDE en Francia liderado por el Dr. Jacques Grill del Gustave-Roussy en París o el BATS liderado por el Dr. Mark Kieran desde el Dana Farber Cancer Institute en Boston). En el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, también se están realizando biopsias a la mayoría de pacientes con sospecha de DIPG. Las muestras obtenidas de estas biopsias son un material precioso, de un valor incalculable, para avanzar en la investigación.
  • Cómo hacer llegar los fármacos al tumor. Sabemos que parte del fracaso de los tratamientos puede deberse a la dificultad de hacerlos llegar al interior de tronco cerebral. Por eso también se están estudiando distintos métodos de administración directa al tumor (a través de cánulas) como el CED por sus siglas en inglés (Convection Enhanced Delivery). Otras estrategias incluyen el uso de transportadores naturales o sintéticos capaces de atravesar la barrera entre la sangre y el cerebro. Estas moléculas se conocen como nanocarriers y en el laboratorio del HSJD se están desarrollando los primero prototipos de nanocarriers conjugados con medicamentos que son efectivos en los modelos animales.
  • La inmunoterapia. La inmunoterapia se ha convertido en una estrategia prometedora en la lucha contra el cáncer. En todo el mundo se están desarrollando distintos proyectos de investigación que tienen como objetivo “enseñar” a nuestro propio sistema inmune a luchar contra las células cancerígenas. En algunos casos de cáncer, como el melanoma, ya se están consiguiendo resultados espectaculares en pacientes que antes eran incurables. De forma muy resumida, la inmunoterapia consiste en manipular el propio sistema inmune del paciente (lo que popularmente conocemos como “nuestras defensas”) para que puedan identificar las células malignas que forman el tumor y destruirlas, como hacen con otros tumores o la mayoría de bacterias o virus que nos invaden.

Si en otros apartados decíamos que la biopsia ha sido clave para avanzar en la investigación del DIPG, existe otro aspecto sin el que los logros que se han obtenido no hubieran sido posibles: la colaboración internacional.

El DIPG es un tumor tan poco frecuente, que es imposible que ningún centro en el mundo, por muy grande que sea, pueda conseguir un número de pacientes relevante para avanzar por si mismo.

Desde el inicio del Fondo Alicia Pueyo, tuvimos muy claro que impulsar la colaboración internacional entre grupos de investigación tenía que ser una prioridad. Por ello, el 26 de Febrero del año 2009, a iniciativa del Dr. Jaume Mora, organizamos el primer meeting internacional de expertos en DIPG, que se celebró en Barcelona.

A partir de esa cita, los diferentes grupos empezaron a colaborar y se tejieron redes de trabajo tanto en Europa como en Estados Unidos. Otras fundaciones se sumaron a la iniciativa y dieron continuidad a estos encuentros.

El Memorial Alicia Pueyo se ha seguido celebrando cada tres años. En el apartado de Noticias pueden consultarse los programas y asistentes a cada una de sus ediciones, con un breve comentario de los principales aspectos discutidos.

El Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona es un centro de referencia nacional e internacional para el tratamiento del cáncer infantil. Además de unidades especializadas en determinados tipos de tumores, el Hospital es un centro acreditado por el ITCC (Innovative Therapies for Children with Cancer). Esta acreditación, junto la Unidad de Ensayos Clínicos Pediátricos del propio Hospital, le permite ofrecer un amplio abanico de ensayos clínicos a sus pacientes.

Algunos de estos ensayos clínicos se han desarrollado a partir del conocimiento científico generado por el propio equipo de investigación del Hospital. Desde el año 2003, el Hospital Sant Joan de Déu dispone de un grupo de investigación en cáncer del desarrollo (cáncer infantil) dirigido por el Dr. Jaume Mora, centrado en ofrecer el mejor diagnóstico molecular a cada paciente y definir el tratamiento más adecuado para cada uno de ellos, tanto después del diagnóstico inicial como  tras una posible recaída.

El equipo del laboratorio, formado por más de 25 profesionales, trabaja también en la identificación de nuevas dianas terapéuticas que permitan diseñar nuevas y mejores terapias para los niños y niñas que sufren esta enfermedad.

Para más información, podéis consultar la página web de la Fundació Sant Joan de Déu y la memoria abreviada de actividad del último ejercicio.

En cuanto a la investigación específica en DIPG, en el apartado EL FONDO de esta web se relacionan los proyectos desarrollados en este centro.

Cómo hemos comentado en otros apartados, gracias al impulso de las familias afectadas, el tejido obtenido de las biopsias y los avances en las técnicas de biología molecular, se ha avanzado más en el conocimiento del DIPG en los últimos años que en las cuatro décadas anteriores.

Actualmente se sabe que el DIPG es un tipo de tumor muy específico, que se diferencia claramente de los tumores cerebrales que afectan a los adultos e incluso de otros tumores intracraneales pediátricos de similares características, pero localizados en otras zonas del cerebro.

Más del 80% de los DIPG comparten una alteración epigenética, la mutación en la histona H3, y existe un amplio consenso en que esta es la característica que define a este tumor a nivel biológico.

Las histonas son unas proteínas muy básicas que ni tan solo forman parte del ADN. De forma muy resumida, podemos decir que su función básica es ayudar al ADN a enrollarse sobre si mismo o “empaquetarse”, para que pueda caber en el núcleo de cada célula. Estas alteraciones epigenéticas, en conjunto con otras alteraciones moleculares en distintos genes (PTEN, p53, EGFR, ACVR1, etc), y otras que de momento desconocemos, en mayor o menor medida son fundamentales para el desarrollo, mantenimiento y progresión de esta enfermedad tan agresiva.

A continuación relacionamos los documentos científicos más relevantes publicados en los últimos años por lo que se refiere al conocimiento del DIPG y su tratamiento.

Avances en el conocimiento del DIPG